Situación docente:
Primer día de curso, nivel uno. Rompiendo el hielo. Propongo que los alumnos se presenten y cuenten sobre sí mismos, sus experiencias y expectativas en relación a la materia que nos compete.
Todo fluye naturalmente hasta que un joven, con cierta displicencia, plantea el asunto: - ¿Se puede filmar sin guión?"...
La pregunta genera silencio. El alumno pone a prueba al docente, situación natural en estas lides en las que el profesor debe ganarse la confianza del grupo y de cada uno de sus integrantes.
Respondo que suele haber algo de mito. El hecho de que algunos directores hayan filmado sin guión o libreto no marca ninguna pauta sino que se trata de “románticas” excepciones. El cine es un arte tan complejo y que involucra tantas voluntades, que sería suicida e irrespetuoso aventurarse sin al menos alguna estrategia previa, llámemosla "guión" o como quieran.
Si bien las variantes existen, en este caso mi función en el aula es pensar el Guión como un hecho posible y sumamente necesario (omití la palabra "indispensable" por diplomacia), tratando de defender nuestro objeto de estudio.
Todo fluye naturalmente hasta que un joven, con cierta displicencia, plantea el asunto: - ¿Se puede filmar sin guión?"...
La pregunta genera silencio. El alumno pone a prueba al docente, situación natural en estas lides en las que el profesor debe ganarse la confianza del grupo y de cada uno de sus integrantes.
Respondo que suele haber algo de mito. El hecho de que algunos directores hayan filmado sin guión o libreto no marca ninguna pauta sino que se trata de “románticas” excepciones. El cine es un arte tan complejo y que involucra tantas voluntades, que sería suicida e irrespetuoso aventurarse sin al menos alguna estrategia previa, llámemosla "guión" o como quieran.
Si bien las variantes existen, en este caso mi función en el aula es pensar el Guión como un hecho posible y sumamente necesario (omití la palabra "indispensable" por diplomacia), tratando de defender nuestro objeto de estudio.
En unos minutos los alumnos terminan de presentarse y empezamos con la clase. Me viene a cuento aquello del guión como entidad “invisible, material de tránsito, de transición, etc etc", que Jean-Claude Carriere y otros sostienen con cierta melancolía. Concuerdo con ellos.
Los guionistas parecemos llorones, dirán que siempre nos quejamos. Pero el guión, en el contexto de un filme estrenado, es el último elemento en ser valorado y tomado en cuenta.
Pongo un ejemplo: en las instituciones que enseñan el Cine se hacen eventos de fin de año, donde los alumnos estrenan en público sus cortos y ejercicios. Todos pueden aplaudir, alabar,
defenestrar y regodearse con las tareas de actores y técnicos, cuya evidencia visual-auditiva es más que evidente.
¿Y el Guión?. Bueno, digamos que se infiere que existe un lindo argumento o historia que la gente sigue, de modo lineal o no. Eso les lleva a decir que el guionista ha sido efectivo.
Pero; ¿en el caso de los guiones que no han sido filmados? ¿Cómo hacemos los del curso de Guión para demostrar que, no solo existimos, sino que trabajamos y produjimos materiales?.
¿La solución sería el "cine leído"?. ¿Cada alumno de pie, frente a la pantalla en blanco, leyendo su texto por micrófono?. ¿Cuántos espectadores se quedarían a escucharnos y hacer el ejercicio de visualizar imaginariamente lo leído?.
Me consuelo en el hecho de que, justamente, esa "invisibilidad" del guión dentro del film proyectado, es su cualidad más valiosa.
Hay que lograr que el mismo no se note, que la vida de los personajes parezca un hecho casual, fortuito, que sucede sin que nadie lo haya programado. De esta ilusión de azar vive el séptimo arte. De que "no se le vean los hilos" que sostienen su andamiaje.
Para el iluminador o el sonidista es fácil pues encuadran el micrófono o el farol fuera de cuadro, y listo.
Pero el guión debe ocultarse más allá del encuadre. Porque hay texto en los cuerpos, las miradas, los objetos, los fuera de campo, las elipsis, los sonidos, hasta en el espacio de la sala donde establecemos contacto con la obra.
Los guionistas parecemos llorones, dirán que siempre nos quejamos. Pero el guión, en el contexto de un filme estrenado, es el último elemento en ser valorado y tomado en cuenta.
Pongo un ejemplo: en las instituciones que enseñan el Cine se hacen eventos de fin de año, donde los alumnos estrenan en público sus cortos y ejercicios. Todos pueden aplaudir, alabar,
defenestrar y regodearse con las tareas de actores y técnicos, cuya evidencia visual-auditiva es más que evidente.
¿Y el Guión?. Bueno, digamos que se infiere que existe un lindo argumento o historia que la gente sigue, de modo lineal o no. Eso les lleva a decir que el guionista ha sido efectivo.
Pero; ¿en el caso de los guiones que no han sido filmados? ¿Cómo hacemos los del curso de Guión para demostrar que, no solo existimos, sino que trabajamos y produjimos materiales?.
¿La solución sería el "cine leído"?. ¿Cada alumno de pie, frente a la pantalla en blanco, leyendo su texto por micrófono?. ¿Cuántos espectadores se quedarían a escucharnos y hacer el ejercicio de visualizar imaginariamente lo leído?.
Me consuelo en el hecho de que, justamente, esa "invisibilidad" del guión dentro del film proyectado, es su cualidad más valiosa.
Hay que lograr que el mismo no se note, que la vida de los personajes parezca un hecho casual, fortuito, que sucede sin que nadie lo haya programado. De esta ilusión de azar vive el séptimo arte. De que "no se le vean los hilos" que sostienen su andamiaje.
Para el iluminador o el sonidista es fácil pues encuadran el micrófono o el farol fuera de cuadro, y listo.
Pero el guión debe ocultarse más allá del encuadre. Porque hay texto en los cuerpos, las miradas, los objetos, los fuera de campo, las elipsis, los sonidos, hasta en el espacio de la sala donde establecemos contacto con la obra.
¡Cuánto resigna de su ego el guionista!. ¡Pero cuánto gana el cine con aquella supuesta "inexistencia"!. Se gana en ilusión persuasiva. Y nuestro cuento ficcional se vive, se cree.
Al fin de la clase, el aula queda vacía.El joven que había preguntado se me acerca y me dice:
Al fin de la clase, el aula queda vacía.El joven que había preguntado se me acerca y me dice:
- "Yo quiero dirigir un largo. Quería ver si usted podría asesorarme porque...tengo un guión escrito..."
Buenas, Hans. Felicitaciones por el blog.
ResponderEliminarVoy a participar de un concurso de guion en España... me piden que haga la SINOPSIS de cada guion. Necesitaria si por favor podes refrescarme un poco el concepto de SINOPSIS y STORY LINE (de paso).
Muchas gracias...
Juan Pablo: te paso un link donde encontré claramente definidos dichos conceptos. Ellos lo explican más claramente que yo. Fijate, yo creo que está buena la explicación que brindan. Un abrazo.
ResponderEliminarhttp://www.slideshare.net/samario69/story-line